Dormir bien, no es una actividad que cada uno puede hacer fácilmente, y en la mayoría de los casos el fallo es por culpa del colchón. Comprar un buen colchón es más fácil de lo que parece, la elección de este, sin embargo, no lo es tanto. Debemos tener en cuenta muchos aspectos a la hora de adquirir un colchón, si tenemos problemas de espalda y cuello junto con los hábitos nocturnos.
Hoy vamos a tratar de ayudarte a escoger el mejor colchón para ti y tus necesidades. De hecho, se trata de explicar cómo elegir un buen colchón, y cómo ahorrar dinero mediante la compra on-line.
¿Qué características debe tener un buen colchón?
Un buen colchón está pensado para hacernos dormir y descansar bien. Así que tiene que garantizar la comodidad y ayudar a aflojar el estrés y las tensiones acumuladas durante el día, lo que nos permitirá disfrutar de un sueño reparador.
En el mercado podemos encontrar infinidad de modelos diferentes, cada uno diseñado para una variedad de necesidades. Así, te puedes imaginar que no es fácil desenredar esta jungla de información. Es importante destacar a la hora de comprar un colchón los distintos tipos de muelles, ya que, su capacidad de adaptabilidad (sólo flexiona allí en donde se ejerce la presión), su transpirabilidad que se traduce en dormir fresco e higiene (el aire que hay entre los muelles, que se mueve al nosotros movernos, genera todos esos beneficios).
El colchón tiene el deber de apoyar el cuerpo en una posición neutral, sin que la espalda o el cuello queden bajo ninguna presión. Todo el cuerpo debe estar alineado, comenzando desde los tobillos hasta la cabeza. Con «alineado» no queremos decir en línea recta, sino respetando. la «alineación curva» que hace el perfil de nuestro cuerpo.
¿Cuándo cambiar el colchón?
Aunque la vida adecuada y recomendada de un colchón es de 10 años, hay colchones que por sus características y su alta calidad, pueden durar varias décadas y no necesitan un cambio. Por ello al comprar un colchón tenemos que hacer una mayor inversión. Sin embargo, hay situaciones que pueden sugerir un cambio, como pueden ser: Mujeres embarazadas o personas confinadas a la cama debido a una enfermedad o accidente.
En este caso, dormir en un colchón adecuado se vuelve más importante.
¿Cómo elegir un buen colchón?
Cuando nos decidimos a comprar un colchón es importante que elijamos uno adecuado para nuestras necesidades. Así que antes de orientarse en un modelo de colchón en lugar de otro, debemos identificar nuestras necesidades.
Por ejemplo: Un colchón duro, en general esta recomendado para todas aquellas personas que sufren de dolores en la espalda. Sin embargo, siempre hay que asegurarse de que este no sea ni demasiado duro, no demasiado blando.
La dureza en un colchón es crucial. De hecho, si el colchón es demasiado duro, es probable que ofrezca demasiada presión sobre el cuerpo, por lo que conseguir una posición correcta es difícil y no descansaremos correctamente.
Por el contrario, si un colchón es demasiado blando nos hundiremos en el y nuestro cuerpo quedara arqueado, por lo que corremos el riesgo de despertarnos más cansados y dolidos de lo que nos acostamos.
Entonces, ¿qué colchón es el más adecuado para nuestras necesidades? Sin duda un buen colchón ergonómico, es lo que necesitamos. Los colchones ergonómicos, tienen la capacidad de seguir y adaptarse a las curvas del cuerpo de cada persona.
Diferentes tipos de colchones.
Colchones viscoelasticos ortopédicos.
Los colchones viscoelasticos ortopédicos gracias a su elasticidad y capacidad de adaptación al cuerpo, favorecen la relajación de la musculatura, así como la correcta circulación sanguínea en todo el organismo.
Gracias a esta característica, son ideales para las personas alérgicas, ya que mantienen a ralla a los ácaros del polvo.
Colchones de muelles ensacados.
Los colchones de muelles han sido durante muchos años los colchones más comprados y usados. Hoy en día, las cosas han cambiado, gracias a la introducción de otros tipos de colchones.
Los colchones de muelles ensacados están constituidos por muelles helicoidales, donde cada uno esta separado del otro. En algunos casos, en la parte superior del colchón, estos muelles se mezclan con otros materiales, tales como el látex o espuma de memoria, para asegurar una mayor comodidad.
Los modelos de colchón de muelles pueden tener diferentes tipos de rigidez y son los más adecuados para personas con sobrepeso severo ya que proporcionan un soporte más firme, facilitando todos los movimientos, incluso los más simples como levantarse y acostarse en la cama.
Como se aprecia en la foto de arriba, no todas las carcasas de muelles ensacados son iguales, unas tienen forma de panal de nido de abeja y otras forman filas y columnas en línea. Si no tenemos en cuenta el grosor del alambre, que cuanto mayor gramaje aportaría mayor firmeza, podemos asegurar que a mayor número de muelles ensacados por metro cuadrado, mayor adaptabilidad para el durmiente y calidad del colchón.
Siguiendo las valoraciones de la Organización de Consumidores el mejor colchón según la OCU es el Nube Visco Gel. Además es el colchón más vendido con este tipo de tecnología en el mercado.
Colchones de goma espuma con memoria.
Los colchones de goma espuma con memoria están experimentando una gran popularidad en los últimos años. Estos colchones se fabrican con varias capas de espuma de diferente densidad, que son capaces de adaptarse a la forma del cuerpo en respuesta al peso y la temperatura corporal.
Se adaptan a la forma del cuerpo, incluso si nos movemos durante la noche el colchón nos seguirá minimizando los puntos de presión y aliviando el dolor si sufrimos de problemas en la columna. Además, si dormimos acompañados no correremos el riesgo de despertarnos si la otra persona se mueve. Este material es capaz de absorber los movimientos independientemente del peso.
Una de las desventajas, es que, en respuesta a la temperatura, tienden a calentarse durante el sueño, en comparación con los colchones convencionales.
Por lo general se recomienda este tipo de colchón para aquellos que sufren de dolor muscular o sufren fatiga crónica.
Colchones de látex.
Los colchones de látex, están diseñados para ofrecer el mejor soporte para la espalda y las articulaciones. La comodidad que pueden garantizar es muy similar a la que ofrecen los colchones de goma espuma con memoria, pero a diferencia de estos, ejercen un empuje contrario al del cuerpo. Por lo tanto son más rígidos y menos envolventes.
Estos colchones están diseñados especialmente para aquellos que sufren de dolores de espalda.
Colchones de agua.
Los colchones de agua son muy similares a los colchones tradicionales en cuanto al tacto. En realidad, se realizan con un material aislante en cuyo interior se inserta una fibra especial o de vinilo el cual contiene el agua.
Son colchones frescos en verano y calientes en invierno.
Los colchones de agua siguen la forma natural del cuerpo, sin depresiones. También son excelentes para aquellos que sufren de úlceras por presión. De hecho, los colchones de agua son higiénicos, anti-alérgicos y anti-ácaros.
El único inconveniente es que necesitan un poco más de mantenimiento y suelen ser pesados y difíciles de manejar.
Esperemos que este artículo te sea de utilidad a la hora de comprar un buen colchón.